El sprint tiene que ver con la fuerza explosiva del ciclista, pero también existen diversos elementos técnicos involucrados que debemos tener en cuenta. Antes de realizar un sprint el ciclista debe decidir de cuándo tiempo y qué tan rápido lo realizará, cómo y cuándo se pondrá de pie en los pedales y desde dónde comenzará a imprimir potencia y fuerza explosiva.
A continuación, te presentamos algunos de los errores más comunes que encontramos durante un sprint, que muchos de nosotros cometemos o hemos cometido.
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Empezar muy temprano.
Para comenzar el sprint final, debemos considerar varios parámetros para elegir el momento correcto. Tales como la dirección del viento, última vuelta, inclinación de la carretera, nuestra posición en relación con los oponentes, etcétera. Después de evaluar todo esto, estamos listos para comenzar el sprint. Con viento a favor podemos comenzar hasta 350 metros antes del final, pero si el aire está en contra, entonces esperamos hasta los últimos 50-100 metros para comenzar el sprint.
Estar muy adelante, mientras que el final aún está lejos.
Si somos los que mantenemos el ritmo de todo el grupo, es realmente improbable que tengamos alguna fortaleza para ser competitivos en el sprint final. En este caso, por supuesto, hay muchos juegos tácticos de los equipos, como el "tren" que va demasiado rápido, sin dejar que alguien lo alcance. Por otra parte, mantener un ritmo muy alto marcando el paso del pelotón durante mucho tiempo, deja poco espacio para que un velocista pueda seguir adelante y rematar la carrera con un sprint.
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Cambiando a un ritmo más rápido e intenso antes de comenzar el sprint.
Comenzar el sprint con 53-11 (o alguna otra velocidad muy pesada) es un gran error por dos razones principales. En primer lugar, el sonido de las velocidades cambiantes avisará al resto del grupo que el sprint comienza, y si ellos llevan una mejor combinación de velocidades estarán preparados antes que tú para comenzar el sprint. En segundo lugar, no existirá el elemento sorpresa y no podremos realizar el ataque para que nadie nos siga.
Nos encontramos muy atrás cuando comienza el sprint.
Si estamos detrás de la octava novena o décima posición y estamos apilados en una sola vuelta, no hay posibilidades de que después del sprint consigamos estar entre los 5 primeros. En las carreras los últimos 200-300 metros antes del final están marcados o señalizados y podemos saber cuándo es tiempo de comenzar el sprint. Pero los primeros 8-10 oponentes lo sabrán antes que tú, así que no tendrás oportunidad de conquistar ese rodeo.
El grupo está muy cerrado al acercarse la última vuelta antes del sprint.
En este caso, lo más probable es que escuches las campanas indicando que la meta se acerca. Cuando el pelotón se encuentra muy cerrado acercándose la última vuelta, y muchos tratan de despegarse para llevarse la gloria, es muy probable que se produzca un choque o una caída espectacular o muy dolorosa, o simplemente que se corten y comiencen los jalones. Debido a que todos vendrán rodeados, el sprint terminará antes de que comenzar, así que es recomendable no hacerlo.
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