El alcohol es uno de los motivos que siempre está presente en nuestras celebraciones al final de una competencia desde el champan en el podio hasta las cervezas. El problema esta cuando el ciclista desea consumir alcohol durante el entrenamiento, y aun más si se encuentra bajo una disciplina de nutrición.
"Consumir alcohol durante el entrenamiento afecta el metabolismo"
El alcohol demora más tiempo en el organismo en ser procesada, incluso mas que la comida, el intestino delgado proyecta de manera directa el alcohol en nuestra sangre, de tal manera que el hígado es el encargado de procesarlo.
Nuestro cuerpo está perfectamente creado, cuando el alcohol entra al metabolismo este lo reconoce como un veneno, es decir el alcohol tiene prioridad sobre cualquier otra cosa que hayamos consumido.
Los procesos metabólicos logran convertir la glucosa en la sangre y está en energía lo que produce que nuestro organismo se vuelva más lento para poder procesar el alcohol, siendo así, es más difícil para el cuerpo perder grasa y al final tiene como consecuencia una gran baja de azúcar.
Desde el momento que se ingiere el alcohol hasta los últimos días el cuerpo se ve afectado para poder liberarlo, de hecho el consumir alcohol durante el entrenamiento produce una pérdida de líquidos, vitaminas y minerales, es totalmente contraproducente para la absorción de nutrientes.
El alcohol y los altos índices de grasa
El alcohol tiene siete calorías por cada gramo y la grasa tiene nueve calorías por gramos, esto significa que el alcohol no está muy lejos de parecer grasa pura sin embargo, sabemos que la grasa produce un aporte de buen combustible, pero este no es el caso del alcohol, pues carece de todos los beneficios del abastecimiento.
Para que el cuerpo pueda procesar 1/2 oz de alcohol puede tardar aproximadamente una hora, en algunas personas puede durar hasta tres horas, lo peor del caso es que consumir alcohol durante el entrenamiento inhibe la producción de la hormona anti diurética esto es traducido a una pérdida total de líquidos y minerales.
El peor enemigo de los músculos en los ciclistas
Cuanto entrenamos nuestro objetivo es formar nuestros músculos para la carrera, siempre sentimos cierto estrés por ser más rápido. Consumir alcohol durante el entrenamiento afecta de manera directa nuestro ciclo circadiano y tiene como consecuencia interrumpir nuestro sueño
¿Porque afecta nuestros músculos?
En nuestro cuerpo se encuentra una hormona de crecimiento que ayuda a reponer los niveles de testosterona, cuando consumimos alcohol este proceso se retrasa es decir nuestra recuperación se ve totalmente afectada.
También si tomamos una gran cantidad de alcohol nuestras fibras musculares tienden a deteriorarse lo que daña totalmente el proceso de entrenamiento.
"Si nuestro cuerpo tarda 4 horas en recuperarse cuando ingerimos alcohol tarda días".
Entonces ¿Podemos consumir alcohol durante el entrenamiento?
Si nuestro objetivo es convertirnos en el más rápido de nuestro país, debemos tener disciplina en cada cosa que ingerimos y tener el objetivo de una abstinencia total.
La moderación y el tiempo son los factores claves cuando se trata de consumir alcohol, el uso de la consciencia logra re-programar nuestros malos hábitos, priorizar la diversión en vez de entrenar va a afectar de manera directa nuestro entrenamiento y como tal nuestra recuperación.
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